Aripo llegó a Portugal con la intención de hacer presente la gastronomía venezolana. Ysmiley, venezolana, pero de padres portugueses emigró a estas tierras lusas con su esposo y fue allí donde nació su hijo; Nos cuentan que siempre en cenas con amigos servían arepas “siempre quise dar a conocer lo bonito de nuestro país. ¡A todo el mundo le encanta (la arepa)!“, termina diciendo Ysmiley.
A raíz de esto, creyeron con fuerza que serían un producto bien recibido por aquel país que los acogió, en diciembre de 2014, se aventuraron y comenzaron con el proceso para finalmente montar su emprendimiento en julio de este año.
¿Cuándo se fue de Venezuela y por qué?
Mi esposo y yo nos fuimos de Venezuela en Diciembre de 2007. La excusa era estudiar, hacer un postgrado, pero en el fondo la intención era quedarnos. Queríamos tener más y mejores oportunidades, para nosotros y para la familia que queríamos construir. Ya no aguantábamos el ritmo acelerado de madrugar para evitar la cola y llegar al trabajo, quedarse hasta tardísimo en el trabajo para evitar la cola de regreso a casa, vivir constantemente con miedo de que te robaran o mataran en un semáforo solo para robarte el carro, el reloj o cualquier cosa. Simplemente, veíamos imposible seguir viviendo en un ambiente tan hostil.
¿Qué es lo que más extraña de Venezuela?
Uao…muchas cosas, pero lo más importante son la familia y los amigos.
¿Qué le motivó a abrir su propia empresa?
Era un sueño de siempre, pero hubo dos factores importantísimos que realmente desencadenaron el proceso. Primero fue el no sentirme realizada a nivel profesional y segundo fue querer darle a nuestra familia la oportunidad de tener algo suyo, nuestro, que pudiéramos trabajar y que sirviera de base para ellos también salir de Venezuela. 
¿Cuáles fueron las dificultades iniciales que enfrentó para abrir su negocio?
Mira, fueron muchas. Fue difícil conseguir definir el modelo que queríamos seguir, fue difícil aprender toda la legislación asociada, fue difícil conquistar a las personas y venderles la idea. Fue también muy difícil encontrar el dinero necesario para la inversión inicial. Y aún existen muchas dificultades que enfrentamos y muchas más que vendrán. Apenas abrimos hace 1 semana, todavía somos bebés de pecho y tenemos mucho para aprender, pero confiamos que conseguiremos superar todos los obstáculos que encontremos en el camino.
Como emprendedor ya consolidado, ¿Qué consejos le da a aquellas personas que están pensando abrir su propia empresa?
Creo que el consejo mas importante es no desistir, ser perseverante, rodearse de personas positivas y emprendedoras con las que puedas aprender y que atraigan lo bueno. Habrá siempre quien te diga que no puedes, que es imposible, unos por ser negativos otros por envidia. Lo que importa es seguir creyendo, confiando y luchando con humildad pero con firmeza.
¿Cómo enfrentó sus fracasos para poder seguir adelante y alcanzar el éxito?
No ha sido fácil, han habido días muy difíciles, en los que todo parece que va mal y se hace difícil mantenerse positivo y firme. Pero ha sido el apoyo de la familia y los amigos lo que nos da fuerza. Y claro, creer y confiar en Dios.
¿Emplea las nuevas tecnologías en su negocio? ¿Cómo le ayudan?
Claro…! El Facebook ha sido fundamental para dar a conocer nuestro espacio, principalmente entre la comunidad de venezolanos que han sido A1 al darnos su apoyo, visitarnos y compartir nuestra página con sus contactos.
¿Qué proyectos a futuro tiene para su empresa?
Bueno…esperamos que esta sea la primera de varias areperas, queremos llegar a otras zonas de la ciudad, a otro público y otros mercados. Pero queremos dar pasos cortos pero firmes. Lo primero es consolidar esta.
¿Cuál es su arepa favorita?
Depende…son muchas…me encanta la de carne mechada pero también una con perico o simplemente con queso rallado derretido con el calorcito de la arepa recién hecha…delicioso!
Un mensaje para los venezolanos que están en Venezuela
Me gustaría que los venezolanos en el país pudieran respetarse unos a otros, pudieran respetar la decisión de cada uno de irse o quedarse. La decisión de emigrar no es la más fácil, emigrar nunca es un camino fácil. No pido compresión o aprobación de nadie, apenas respeto.
Cada uno escoge su camino y a aquellos cuyo camino, cuya decisión fue luchar por Venezuela desde Venezuela, les debo mi admiración y respeto, y les deseo suerte, éxito, fuerza, salud y que Dios los guíe y cuide en su camino.
Contacto: